Aprender a enhebrar es una etapa suplementaria dentro del trabajo con los dedos. Asimismo también se trabaja la coordinación ojo mano y la motricidad fina.

Para empezar con esta actividad, podemos darle al niño un cordón con la punta rígida, que la podemos preparar nosotros mismos enrollando cinta adhesiva al principio del cordón hasta unos tres centímetros, y al final del todo un gran nudo para que haga de tope para que no se caigan los abalorios.

Después le enseñaremos al niño lentamente como debe sostener el cordón y como debe enhebrar los abalorios, y siempre de la misma manera, para que aprenda los pasos para hacerlo.

Al principio, el niño sólo se preocupará en el acto de enhebrar, y cada abalorio que coloque será muy satisfactorio para él.

Más adelante, cuando ya lo domine, empezará a elegir los abalorios y a colocarlos de la manera que más le guste.

Cuando el niño es más mayorcito y ya domina sus movimientos, perfecciona el acto de enhebrar creando collares con diferentes cordones y abalorios de diferentes formas y colores. De esta manera, el niño también desarrolla la creatividad.

Para los niños mayores, también se puede practicar con los zapatos, primero deberán aprender a pasar los cordones por los agujeros, poco a poco irán aprendiendo a ponerlos

enhebrar zapatosde la forma correcta.

Más adelante deberán aprender a hacer el nudo y por último a hacer el lazo. Esto

último será bastante complicado para ellos al principio. Se deberá enseñarles lentamente como deben ir haciendo la lazada paso a paso, y repetir el acto las veces que sean necesarias hasta que coordinen todos los movimientos.

Con todos estos actos los niños ejercitan la paciencia y cuando aprendan a atarse los zapatos obtendrán un gran sentimiento de satisfacción.